Hoy reflexiono sobre nuestro mundo. Esta fecha, 22 de abril, la humanidad ha determinado que será el Día del Planeta Tierra. Creo que lo hacemos para subrayar ante los medios la fragilidad de esta esfera de agua, aire y tierra que flota sobre la inmensidad del espacio sideral. Por mi formación, siempre he tenido clara consciencia del medio ambiente y la diversidad del hábitat, así como respeto por todas las criaturas vivientes.
Tal vez esta generación que se levanta, de humanos nacidos en este nuevo milienio, detengan el calentamiento global, la contaminación y adopten por necesidad, el uso de fuentes de energía limpia, pues nuestra generación poco ha hecho en esa dirección y les heredamos un planeta con graves problemas ambientales, desigualdades, injusticias, propias de una sociedad global desarticulada en lo sustantivo, en la congruencia, en el concepto más elevado de la palabra humanidad.
Hoy también mi hijo cumple 6 años de vida, por esas casualidades del destino, si es que la casualidad es parte del plan maestro universal. Mi mejor regalo para Pedro Javier será formarlo a tenor con lo que predico, esperando que a su vez pueda aportar algo a su generación y al porvenir de la humanidad. Feliz cumpleaños, querido hijo.